Andreu Mas-Colell, el mayor acierto de Artur Mas para la economía catalana y española

Desafortunadamente estamos acostumbrados a padecer una clase política forjada por espíritus labriegos y mentes lacónicas por lo que el nombramiento del catedrático Andreu Mas-Colell para la cartera de Economía, Finanzas, Universidades e Investigación del Gobierno de la Generalitat de Cataluña es una noticia que agradeceremos quizá con mayor gratitud con el paso de los años si las circunstancias, que en política son altamente inestables, resultan favorables para que esta cabeza privilegiada pueda desarrollar la función por la cual se le ha nombrado. No obstante, y por fortuna, no es un personaje advenedizo ni tampoco un profesional de la política, aunque ya ocupara la cartera de Universidades durante el gobierno de Jordi Pujol.

Nadie discute que el sustituto del también catedrático Antoni Castells para susodicha cartera es, sencillamente, uno de los mejores sino el mejor. La trayectoria profesional de Mas-Colell está fuera de toda duda al tratarse de una de las figuras más acreditadas a nivel internacional en el ámbito de la política científica, disciplina de la que ha sido profesor en dos de las universidades más relevantes de los EEUU: Berkeley y Harvard. A su regreso a España fundó junto a Enric Argullol la Universidad Pompeu Fabra impulsando de manera especial la facultad de Economía. Hasta hace poco, Mas-Colell era secretario del Consejo Europeo de Investigación en Bruselas.     

Mas-Colell, que es una referencia mundial en el campo de la microeconomía, en especial de la teoría del equilibrio general, es la cabeza más indicada para albergar en una misma cartera las competencias de Economía y Universidades – e investigación – y de llevar a cabo algo tan pretendido pero innovador en España como fomentar una economía que hunda sus raíces en el conocimiento. Desde luego, Mas-Colell aterriza de nuevo en la actividad pública en momentos de escepticismo económico y sabiendo que en política se exigen resultados a muy corto plazo, no obstante, a pesar de la dificultad y descontado que no posee ninguna barita mágica, es la figura más clarividente para atenerse a la contención del gasto público y la reducción del profundo déficit herencia del desgobierno del tripartito de los señores Maragall y Montilla, así como la drástica reducción del desempleo.   

Si la política y la coyuntura no le devoran estamos ante una privilegiada oportunidad de abrir un camino nuevo en el ámbito económico y productivo que marque no sólo el presente sino también el futuro de España, un país, tristemente, marcado por el partidismo y la confrontación que aún no ha sabido salir de la postguerra.

 

Interesante entrevista al señor Mas-Colell donde reflexiona sobre la crisis económica.